FotoRevista ¦ 23 años en la web
Nosotros preferimos opinar que la fotografía -cualquier imagen fotográfica- es siempre el reflejo de las emociones (o intenciones) del fotógrafo, por lo tanto es subjetiva o dicho de otra manera, es mentira.
Esto no generaría ninguna duda si hablamos de la fotografía como un hecho artístico, ya que nadie pretende que el arte pueda ser objetivo. La misma puesta de sol tomada con dos puntos de subexposición ¿acaso no nos muestra una imagen mucho más pesimista y opresiva que otra tomada con la exposición correcta?
Pero si hablamos de la fotografía como documento (periodística, documental, social o simplemente histórica, antigua) entramos en conflicto.
Si la fotografía es mentira ¿como podemos sostener
que cualquier hecho pasado fue así porque hay un archivo fotográfico
que lo demuestra? Simplemente, no podemos.
Podrán decirnos que una foto satelital al no tener un fotógrafo
detrás debería ser una imagen objetiva, y tal vez lo
sea hasta que alguien elija la ampliación y el encuadre que
va hacer utilizado, entonces esa misma imagen satelital pasa a ser
una imagen subjetiva puesta al servicio de quien la edita.
No hay ni puede haber objetividad alguna en la fotografía, siempre detrás de ella está la mirada (y las emociones) del fotógrafo, así como detrás de la elección y el reencuadre de una imagen está también la subjetividad del fotógrafo (o del editor, del empleador, del historiador, del mercado, incluso hoy más que nunca de las presiones sociales del momento requeridas por el sistema).
Hasta la próxima...
FotoRevista
