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25/03/14 12:37:44
¡No, para nada!. En general uno presenta imágenes que de alguna manera le atañen. Éstas, no siempre son entendidas o interpretadas como el autor desea porque abordan un tema subliminalmente, no muy claro a primera vista y necesitan segundas miradas o con ambages. También están aquellas con una impronta personal impuesta por los acontecimientos que les son suyos enteramente, retrata y presenta para ser consideradas. Creo que a esto último le pertenece el caso de la presente.Tiene un título, el cual remite a una situación muy particular. Un canicular verano en la ciudad de Bs As me encontró un día en un verdadero estado de sopor, en un departamento pequeño y mirando por la ventana una radiación deslumbrante ingresando por ella. Para aumentar la pesadez, el NEGRO lo pintaba todo: cortinas, sillas, mesa y el ambiente en penumbra completando el cuadro. Es lo que quise transmitir con mi fotografía, la pesadumbre, el encierro, lo incómodo y ese calor sofocante haciéndolo posible, por lo visto no lo he logrado en plenitud, entonces, mi imagen a fracasado como tal y me hago cargo, aunque haya personas a las cuales les guste por el juego de figuras que en ella interactúan, brillos y oscuridades sugiriendo. El relato, entiendo, no la hace ni mejor ni peor, solo la muestra, renga, no incompleta, puesto que para eso está el contemplador. Es, si puedo dejar un consejo, lo que hay que evitar.
Ruben Ricardo Arteaga 
