Carlos Costamagna 

Tema: Varios - Enviada el 30/06/16 a las 10:14:24 - Obra N° SFOT160630101424 

"Querido Leo"

  Hola Lio (¿o Leo?)

Te escribo porque, en la Argentina de hoy, todos te escriben. ¡Menos mal que son cartas en formato digital, o ya habrían desaparecido varios bosques! Además, no tengo tu teléfono, lo que es preferible porque seguramente en pocos días me llegaría la cuenta de la llamada en Euros, y en catalán, y ya tengo suficiente con la factura de gas que envía el Ministro de Energía Aranguren (que es vasco, pero igual) que aún no llega y que ya se ha convertido en una obra maestra del suspenso y del terror. Además, en catalán sólo se decir ‘abrazonets molts’, y no creo que lo arregle con un abrazo.

Te escribo porque todos te escriben, como si cinco minutos antes no te hubiesen bajado los santos de la onomástica… ¡Yo no lo voté! O, yo no lo pu… Es lo mismo.

También te escribo porque estoy en la cama con gripe y me aburro, y si enciendo la tele hasta en los westerns leen cartas para vos. Momentos atrás vi como John Wayne le hablaba entre lágrimas al Apache Cochise sobre tu renuncia y le pedía que te ‘escribiera’ unas señales de humo… como si no estuviéramos hartos de que nos vendan humo.

Pero no estamos solos, mirá a los british clamando por la vuelta aún antes de partir. Pero lo de ellos es más elegante, en lugar de marchar al obelisco lo hacen a Trafalgar Square… ¡no me digas que no es más chic!

¿Que quién soy yo?… ¡Claro! ¡Qué descortesía a la mía!... ¿te acordás del 30 de marzo pasado cuando vos y Masche regresaron a España en un vuelo de Iberia? Bueno, yo soy el único que en la manga no se sacó una selfie a tu lado. El mismo que, cuando la azafata en su idioma plagado de ‘Zs’ te daba la empalagosa bienvenida, te advirtió al oído que seguramente era del Madriz (a mi no me dijo ni la mitad de lo que te dijo a vos… se ve que no le caí tan simpático). Luego me aclaró que era del aleti, lo que no es tan malo, allí están el Cholo y Kranevitter, y no está el portugués ese que se hace el lindo. La foto que adjunto es de ese momento.

Y hablando de la foto, mirá lo feliz que estabas. Quizás te duraba el efecto del fernéconcoca, ya que se había jugado en Córdoba, y nosotros somos menos ciclotímicos que en Baires…
O porque se acababa el martirio de las selfies en la manga.

¿Qué todavía no te pedí que vuelvas?... ¡Si nunca te pedí que te fueras!

Mirá, tranqui, si querés te paso la dirección de dos buenas amigas que tenemos en Barcelona, se juntan, van a sacar fotos, no selfies, ni de esas otras con el palito largo ese al que le ‘atan’ la cámara en el otro extremo, no, fotos de verdad y vas a ver como el mundo recupera su forma plana (o redonda). Te advierto que una de ellas tiene la horrible costumbre de salir a ‘fotear’ al amanecer, pero después del segundo fernéconcoca se adaptará a usanzas más normales. Y en diez días me llamás… si vos, yo estaré ocupadísimo escribiéndole cartas a Aranguren, el de origen vasco.