18/06/23 09:23:18
A todos mis queridos amigos y compañeros de FotoRevista, muchas gracias por todas vuestras apreciaciones
/ Un comentario sobre esta foto. Como todo peregrino a Jerusalem, fui a visitar el unico muro que resta del Antiguo Templo, al que se le llama Muro de los Lamentos o Lamentaciones. Está dividido en dos partes, una es el acceso para los hombres, la otra, algo más corta, para las mujeres. En la parte de los hombres, suele haber cánticos y rondas, en la de las mujeres, sillas en las que se observa a mujeres meditando o rezando. Las que se acercan la más posible, y esto es lo que me llamo la atención, y por eso el nombre de la foto, lloran, algunas quedamente, otras a lágrima viva. Supongo que estar en presencia de un muro de hace casi 3000 años funciona, para el pueblo judío, como para nosotros los católicos, el acto de la confesión. El Muro actúa de vínculo entre ellos y Dios. Por ello también los deseos escritos en los papelitos entre las junturas de las piedras. Me conmovió profundamente, y hubiera deseado que ese sentimiento de reconocimiento y emoción ante la devoción ajena se transmitiera en la imagen.
Carmen Estevez