Como mejorar la exposición con flash usando el número guía
Muchos fotógrafos que encuentran problemas para exponer correctamente utilizando el flash.
¿Cuáles son los secretos para lograr una exposición perfecta?
Eligiendo un flash de estudio
Consideremos la potencia de los flashes. ¿Cómo se miden o se comparan diferentes flashes entre sí? Algunos fabricantes de flashes de estudio suelen emplear como indicación de la potencia de sus equipos una unidad derivada denominada Watt por segundo, que se abrevia como Ws o W/s y que expresa la energía equivalente para sostener una potencia de 1 Watt durante un segundo. También hay una unidad llamada Joule, o Julio, que expresa lo mismo y que es utilizada por otros fabricantes, de modo que podremos tomar ambas expresiones como equivalentes. Se trata de algo parecido a la unidad que emplea la empresa de electricidad para cobrarnos el consumo: el Kilowatt/Hora.
Ahora bien, los Joules o W/s expresan la potencia eléctrica que el circuito del flash entrega a la lámpara de disparo. Pero aquí empiezan las diferencias.
En primer término, sabemos que hay lámparas más eficientes que otras, que producirán más o menos luz con la energía eléctrica que reciben.
Además la lámpara del flash produce un flujo luminoso en todas las direcciones del espacio, del mismo modo que emite luz una lamparita colgada en el centro de una habitación. En el caso de los flashes de estudio, ese flujo luminoso está dirigido por un reflector intercambiable que rodea la lámpara. La consecuencia de esto es que el aprovechamiento de la potencia entregada por el circuito a la lámpara está condicionado por la eficiencia luminosa de la misma y por el tipo de reflector que tenga colocado el flash, con lo que la medida de potencia eléctrica entregada a la lámpara es sólo un indicio de lo que puede llegar a ser la iluminación producida.
Los flashes de estudio cuentan con un control de potencia variable, y su potencia se expresa siempre con el control en su punto máximo.
Veamos un ejemplo práctico: Un flash de estudio con un reflector estándar (el conocido reflector corto “para paraguas”) producirá luz en un ángulo abierto, mientras que un flash de estudio con un reflector plateado más cerrado producirá más potencia pero en un ángulo más cerrado, potencia que se concentrará en una superficie menor. Lo mismo ocurrirá si empleamos un paraguas blanco o plateado. Con el paraguas blanco repartiremos menos luz en más superficie, mientras que con el paraguas plateado concentraremos más luz en menos superficie, con dos resultados diferentes.
La capacidad luminosa de un flash de estudio está seriamente condicionada por los accesorios que usamos.
La potencia nominal en W/s o Joules no nos permite establecer el diafragma a usar, sólo nos sirve para comparar diferentes equipos al momento de comprarlos, momento en el cual podemos usar además otro parámetro comparativo que es la relación Dólar por W/s. Veremos así que los equipos de baja potencia, por ejemplo de 200 W/s presentan históricamente un precio por W/s más alto que los equipos de mediana potencia , por ejemplo de 500 W/s. En el otro extremo, los equipos de alta potencia, de 1500 W/s o más vuelven a ser caros si se toma la relación Dólar por W/s.
También tenemos que tener en cuenta que varias fuentes de 500 W/s se pueden sumar, pero que una fuente de 1500 W/s no se puede dividir.
Los números que designan a los diferentes modelos de flash de estudio no siguen un patrón comparativo. Algunas empresas colocan como número del modelo la potencia en Joules, otros usan el número guía para ISO 100, y a veces nos encontramos con números de fantasía unidos al nombre del flash.
Cómo determinar la exposición con el flash de estudio
No hay duda que la determinación más exacta y práctica de la exposición con flash de estudio se hace con un fotómetro de mano, que tiene dos funciones. La primera es comparar la intensidad de la iluminación producida por cada una de las unidades que usamos, la segunda es la determinación del diafragma de exposición de la toma.
Un fotómetro no es una inversión enorme, no se desvaloriza con el tiempo, puede costar el 5 % del valor de un equipo sencillo de réflex digital más flashes de estudio y nos asegura un buen control de la calidad.
Muchos fotógrafos emplean, sin embargo, un curioso método para encontrar la exposición: hacen disparos sucesivos tratando de encontrar la combinación ideal entre la distancia del flash al sujeto con el diafragma y la luz ambiente. Esto tiene como resultado el desgaste del obturador de la cámara empleada como fotómetro, del propio flash y, lo que es más grave, el desgaste de la persona fotografiada, que recibe flashazos a discreción sin que el fotógrafo le preste atención porque está preocupado en acertar el diafragma correcto, sobre todo en el primer tramo de la sesión fotográfica.
Sería bueno entonces conocer también otro método para determinar el diafragma, más viejo que el fotómetro, y que puede servir como alternativa al trabajo “a ojo”. Cuando no existían los flashes dedicados ni los automáticos, la única manera de acertar el diafragma correcto en fotoperiodismo, bodas o fotografía industrial era usar el número guía.
Que es el número guía?
Es un número que expresa la potencia luminosa que emite un flash con un reflector determinado y que, dividido por la distancia en metros al sujeto nos va a dar el diafragma correcto para una determinada sensibilidad.
El número guía se usó desde la invención del flash de magnesio, en el siglo XIX hasta 1975, fecha de la aparición del flash automático, de modo que no sería una mala idea retomar su uso con las ventajas de los equipos actuales.
Veamos cómo se usaba: un fotógrafo estimaba que su personaje aparecería en escena a 4 metros de distancia, por lo que dividía el número guía de su flash, que podía ser 45, por los 4 metros, con lo que estimaba un diafragma f/11 para ISO 100. Si el personaje se acercaba o se alejaba, volvía a calcular, todo esto sin ver la foto hasta que estuviera revelada. No parece un mal método.
El número guía nos dice que tan potente es nuestro flash, o dicho de otro modo, que superficie puede iluminar con una determinada intensidad.
Hay cuatro modos para determinar el número guía de nuestro flash
1) Comenzar a usar el número guía que figura en el manual provisto por el fabricante. Generalmente se trata de una apreciación optimista, pero sirve como punto de partida. Si consistentemente se obtienen resultados sobre expuestos elevaremos el número guía, mientras que si los resultados son de subexposición, reduciremos el número guía. Hay que averiguar para que tipo de reflector está calculado ese número guía.
2) Buscar en la web cual es el verdadero número guía de nuestro flash. Aquí les dejo dos links para empezar:
http://olegkikin.com/guidenumber/ y http://www.camerarepairer.co.uk/FlashSpec.htm
3) Conseguir un amigo con fotómetro de mano y determinar que diafragma obtenemos a un metro de distancia para una determinada sensibilidad. Ese es el número guía.
4) Colocar una persona a dos metros de distancia del flash y disparar varias tomas en todos los diafragmas, con el flash pegado a la cámara. Seleccionar la toma correcta. El diafragma de esa toma debe multiplicarse por dos (Debido a los dos metros de distancia) y ese será el número guía. Proponemos hacer el cálculo a partir de los dos metros para evitar que pequeños errores de distancia puedan alterar el resultado
Cómo usar el número guía
Si tenemos un flash de estudio con un número guía 80, y lo estamos empleando directo, dividimos la distancia del flash al sujeto por la distancia en metros, y ese es nuestro diafragma. Supongamos una distancia de 10 metros: Nuestro diafragma es f/8.
Si vamos a rebotar ese mismo flash en una pared blanca lateral, sumamos la distancia del flash a la pared y de la pared al sujeto. Por ejemplo: Distancia del flash a la pared 2 metros. Distancia de la pared al personaje: 5 metros. Total: 7 metros. Si dividimos el número guía 80 por los 7 metros, obtenemos 11,42, es decir un diafragma entre f/11 y f/16. Pero como estamos rebotando la luz sobre una pared blanca, abriremos un punto más de diafragma, para compensar la absorción de la superficie, con lo que nuestro diafragma estará entre f/8 y f/11, Para medir las distancias usar nuestra cámara, o aprender a dar pasos de un metro de largo y contarlos.
Cómo trabajar con el flash dedicado
El flash dedicado en modo TTL resulta muy útil para tomas en movimiento, pero en el caso de las tomas fijas, como retratos o naturalezas muertas, se convierte en un problema, porque cualquier alteración del motivo, como la posición ante el fondo, los gestos o los cambios de ropa o fondos afectarán la exposición.
Si usamos un flash dedicado junto con un soporte para paraguas, lo ideal es colocar el flash en modo manual y determinar la exposición calculándola mediante el número guía. Sumaremos la distancia Flash – Paraguas a la distancia Paraguas – Sujeto, dividimos por ella el número guía y abrimos un diafragma en el caso del paraguas blanco.
Desde hace más de 150 años, el principal problema técnico es el de la exposición. No es posible hacernos ningún planteo acerca de cómo tomaremos una fotografía si antes no determinaos qué diafragma vamos a utilizar. El número guía puede ser un gran aliado en esta tarea.
Mariano Molinari